Han pasado meses desde que no entro, entradas escritas a medias perdidas en una sinrazón y sin sentido.
Hoy repaso, una a una las páginas de un diario que se quedó en el olvido aparente.
Y manejo de nuevo por estos lares, el timón de la palabra.
Entre guaridas, entre rostros y amistades, me manejo divisando un horizonte de exámenes y líneas.
Y todo quedó en un Torcal permanecido y ausente tanto como silencioso y sutil.
Besos. Soy yo siempre. Así po/li/fa/cé/ti/ca
Por eso se que un día volverás a pasear por mi cuerpo cual extraño apasionado que descubre su tesoro.
Besos.
De esos.
Que nunca te han dado.
Tuya.
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